martes, 7 de agosto de 2012

Dama y Obrero, la meta-novela de TVN


Ya podemos asegurar que la propuesta de TVN de inaugurar una franja de telenovelas chilenas para después de almuerzo fue exitosa, ya que la sucesora de Esperanza también es un éxito de sintonía. La cebollera historia de amor entre el jornal de la contru y su jefa de obra, musicalizada apropiadamente del tema exclusivo de Américo “Lágrimas de Amor” (#pícalafinita), es una apuesta que ha conquistado al público (me incluyo) y a la vez, refresca nuestras tardes. Para nadie es un misterio que gran parte de su éxito se debe a que no reniega de los tópicos clásicos del melodrama latinoamericano, rey indiscutido de aquél horario. Si Dama y Obrero fuera sólo eso sería entretenida, pero no un aporte al género. Esta creación de José Ignacio Valenzuela, “el Chascas”, tiene matices que la llevan mucho más allá que sus pares venezolanas y mexicanas. Vamos por partes.

0) Excelente opening:


1) "Te amo, pero parece que somos hermanos":


¡Por la Virgencita de Guadalupe! somos hermanos wey

Desde el primer capítulo de Dama y Obrero están presentes tramas clásicas como el amor "imposible" entre ricos y pobres representada por las parejas de Julio e Ignacia, Irene y Rubén (los hermanos de los protagonistas) y, claro, la pareja que dio inicio a todo en el pasado: Gina y Mariano (la “tía” de Julio y el papá de Ignacia). No podían faltar en esta novela: la guagua perdida (Julio, que no es hijo de Margarita, sino de Gina), el protagonista pobre que en realidad no lo es (Julio, hijo de una nueva rica) la tradicional amenaza al amor de los protagonistas: la posibilidad de que sean hermanos de sangre y la infaltable Noche de Pasión (con mayúsculas) que es el puntapié inicial del romance estelar y de la novela (el idílico fin de semana en la playa de Julio e Ignacia). Falta el puro hijo del cura. En todo caso, en vez de que toda la trama gire en torno a estos temas y los personajes se pongan cargantes al respecto, son amenazas subyacentes que en algún momento explotarán.

2) Es rápida:

"Hola, yo viví en USA y no tengo acento (problem, Amaro?)"

A diferencia de las teleseries venezolanas, mexicanas & others, Dama y Obrero avanza. Este dinamismo se ha mantenido desde el debut de la novela hasta estos días. Es decir, si te la pierdes por 3 días al cuarto puedes seguir la historia, pero te has perdido secuencias importantes o no tanto, pero que modifican el escenario. Instancias que en las teleseries extranjeras se postergan hasta el final. Si te pierdes 3 capítulos de estas últimas, el cuarto parece su continuación. 
Esto es porque Dama y Obrero no se enreda en escenas sobreactuadas de llanto, odio y/o momentos en que oímos los pensamientos de tal o cual personaje (Ver el monólogo del hámster), lo que es redundante debido a lo básico de los objetivos de los personajes centroamericanos. No se puede dejar de mencionar que ahora ya no es tan así, debido a la mala costumbre de cualquier canal chileno, sobretodo TVN, que al notar que emite un programa exitoso estira el chicle en pos de obtener ganancias. Lo que en DyO se traduce en que un capítulo es 60% de resumen y adelantos y 40% de nuevo material.

3) Tiene identidad:


Dama y Obrero es una teleserie con identidad, o por lo menos con una que llega más a sus televidentes, ya que integra al frígido e inaccesible mundo ABC1 que busca retratarse en las nocturnas del mismo canal con otros escenarios más céntricos y populares que están mucho más cerca de las casas de nosotros y ustedes, o las de nuestros parientes pobres o ricos, vecinos o conocidos. Podemos desglosar esta buena construcción de imagen en tres aspectos:

Lágrimas de amor (vía Lugar_Citadino™ )

Las secuencias de transición, donde abundan pasos de buses del Transantiago, imágenes del centro, de las calles, de la construcción inserta en la ciudad.


La escenografía propiamente tal, donde lo más identitario sería el estar de la casa de Julio, en cuyas paredes verde manzana carentes de jerarquía en cuanto a la decoración conviven pacíficamente crucifijos y banderas del equipo de futbol regalón de la familia: Santiago Wanderers.
No es nada contra Canal 13, pero a nivel de proporciones y espacios estas casas se acercan más a la realidad, ya que en las escenografías del canal del angelito se adivina una amplitud de espacios y una altura de cielos interiores superior al promedio, con una decoración que apuesta por la poca combinación entre papeles murales y tapices, siendo que en las casas populares actuales el papel decomural ya es historia. Todo esto se refuerza en el contraste con la pulcritud y arquitectura de la casa de Ignacia y Tomás.

"Voh anda a platachar que ya llegó el hormigón"

La elección de la "contru", un ámbito popular que pocas veces ha sido abordado, como un escenario relevante dentro de la trama. Para una que ha estado en ese mundo y conoce como es una instalación de faena, que una novela retrate ese mundo provoca un cierto incentivo adicional para verla. En este caso, desde el vestidor de los obreros, pasando por las escenas exteriores de obra, hasta la precaria oficina de la Administración de Obra, todo es creíble (incluso el letrero de la Constructora Omega xD). Solo falta ver a Ignacia yendo de camino a un baño químico “privado” con llaves en su mano.

No encontré una imagen de la faena de Oro Verde :(

4) Buenos personajes y caracterizaciones:

Quiero una chaqueta con chiporro/Quiero entradas para Skrillex

Los personajes están bien logrados y que sea un elenco acotado ayuda a que todos tengan un rol claro en la novela. Nada de primas del sur y gente de la Caleta que aparece en la mitad de la teleserie (igual te amamos,  Primera Dama). Aunque nada sería lo mismo sin esa excelente caracterización a nivel de vestuario.
La vieja chaqueta de mezclilla de Julio que deja ver su camisa a cuadrillé, el look hardcore-cumbia-nena del Neto (menos conocido como Christopher), la ropa sin gracia de Olegario quien parece estar siempre en la Obra, el jumper y corte infantil de pelo de Irene y el look recargado de Gina.

Es discapacitada de día y camina en la noche (Soltera Otra Vez, C 13)

Otro aspecto a destacar es la aparición de un personaje discapacitado, recurrente en el melodrama mexicano. Ella es Mireya, hija de Olegario y novia eterna de Julio, que tiene un rol protagónico. En la novela se ha tratado de forma realista y con respeto su condición. No se avizoran escenas del tipo “Maldita Lisiada/Peluquera” en el horizonte, a diferencia de lo que hubiera pasado -con toda seguridad- en una del MEGA.

5) Una cucharadita de comedia:


Otra diferencia con las novelas centroamericanas es que estas son súper graves y sus personajes lo toman todo a la tremenda, resultando ser paradójicamente cómicas en su patetismo. Dama y Obrero toma nota de otro referente infinitamente mejor: las teleseries brasileñas, que se caracterizan por incorporar personajes que tienen un rol cómico relevante. En todo caso, en aquellas, estos personajes cómicos suelen ser desagradables: abiertamente arribistas, codiciosos o inverosímiles.
En Dama y Obrero este rol más cómico lo sostiene la abuelita de Ignacia, Alfonsina (Delfina Guzmán), quien hace reír con su sinceridad, su oculta afición al pucho (y sus cada vez más infructuosos intentos por esconder el olor que deja en la casa). Lo bueno es que este personaje no se queda en eso, ya que es la más cuerda de la familia de Ignacia, a quien aconseja con ternura (y además apoya su relación con Julio).

Hermanas y rivales

El otro personaje cómico es la mamá de Julio, Margarita, que resulta muy divertida en su coqueteo algo brusco (y no correspondido) con Olegario y el triángulo que forma con este y su hermana Gina.

6) La cuota tránsfuga:

#comiéndosealasuegra

Allí donde las novelas centroamericanas solo se remiten a insinuar (y ni eso) Dama y Obrero no se detiene. Un ejemplo es el “romance” entre Engracia, la malvada madre de la protagonista (un personaje clásico de teleserie latina) y su yerno Tomás. Si al principio solo parecía que la señora lo idealizaba, luego parecía estar al borde de la obsesión con él y algunos capítulos más tarde nos dimos cuenta que efectivamente se lo quería comer con papas fritas. Todos pensamos que quedaría hasta ahí como en tantas novelas que CHV transmite en sus tardes...pero pasó. Los vimos besarse sobre la cama de Ignacia y conspirar juntos para mantener a salvo el matrimonio de Tomás, constituyéndose en la pareja más retorcida de las 16:00 hrs.
El mismo Tomás es otro caso. Mientras que en la teleserie clásica latina los hombres rara vez son malos (a excepción del villano, que nunca es protagonista) y siempre parecen ser marionetas de mujeres más inteligentes para planear maldades (pero estúpidas cuando se trata de hombres), Tomás es un tipo complejo. Doble standard, manipulador y posesivo, llegando a mostrar un grado de sadismo en su relación con Ignacia.

"¿Te tinca hacer el pedido online? Así minimizamos tus salidas de la casa"

La otra escena clave que nos demuestra que Dama y Obrero no le hace asco a la turbiedad es cuando vimos a la hermana de Julio, Irene, preparando una infusión de hierbas abortivas y luego botándola por el lavaplatos, arrepentida. Aunque finalmente la escena revela que decidió tener a su hijo con Rubén, fue un acercamiento realista a lo que haría una adolescente chilena cualquiera frente a la disyuntiva de tener (o no tener) a un hijo no deseado.

7) Crítica Social:

"Mamita, no me alcanzó pa'l frigider"

Esta no es una comedia delirante como la apuesta vespertina de TVN, Pobre Rico, que también tiene como tema central la desigualdad socioeconómica de nuestro país. A diferencia de aquella, que se desvive por crear cada vez más situaciones ultra polarizadas dignas de Cara y Sello (MEGA), Dama y Obrero nos entrega un poco más de elaboración en sus observaciones.
La escena clave es una donde Irene acepta recibir dinero por parte de Engracia para mantener en silencio su embarazo y cortar todos sus vínculos con Rubén (jaja medios vínculos con Rubén, en todo caso – así le llaman ahora a “pasar la noshe” con alguien) le declara a Julio sentirse mejor “ahora que tiene plata”. Es el retrato de una colegiala pobre que accede súbitamente al poder adquisitivo y a la vez tiene contacto con otro nivel socioeconómico que la rechaza y desprecia, perdiendo su humildad característica casi al mismo tiempo que su inocencia (al percatarse de que fue utilizada por Rubén). Aunque debo decir a su favor que hizo cosas buenas con el dinero como comprarle una máquina de coser a su mamá, ocultando su procedencia, eso si. Para que hubiera sido aún más chileno todo, Irene hubiera comprado el pedido o invitado a su familia a comer completos a la picada de comida rápida más cercana. ¿Hogs? eso no existe en Dama y Obrero.


La Irene invita


Veredicto: Dama y Obrero es una novela muy bien hecha técnica y argumentalmente, que transmite amor a sus personajes y respeto por su público. Y más que eso, su verdadero plus es que sabe actualizar algunos aspectos de la era Sabatini de las teleseries chilenas (crítica social, desigualdad, identidad, cariño por lo popular) y los fusiona con una pequeña dosis de la turbiedad del mundo ABC1 de sus teleseries nocturnas. Una meta-novela que en sí contiene la esencia de las teleseries latinoamericanas a la vez que la historia reciente del área dramática de TVN. C

6 comentarios:

  1. Muy buena "Dama y Obrero", la vemos en youtube desde Suecia!

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  2. buen análisis cabros. se las mandaronn

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    1. Thank You! Pucha que está entretenida ahora la novela =D

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  3. Creo que esta telenovela tiene actores muy Buenos. Sin embargo pienso que el guión no acompaña mucho a estos actores. El tema principal esta mas que sobre explotado. La telenovela transmite angustia, preocupación, tristeza y una serie de emociones negativas. La verdad que no puede continuar viéndola, ya que considero que no tiene ningún aporte. Lo siento por mi comentario, pero es una critica a la persona que lo escribió, realmente el guión tiene una gran falta de creatividad.

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  4. Pues para mi gusto comenzó bien, me entretenia, pero ya estoy bastante avanzada y he de deciros que estoy a punto de dejarla, pues me aburre bastante, no la veo dinámica por ninguna parte, la veo sosa, repititiva; creo que no deberian dar tantas vueltas a las cosas, para mi su evolución es de mas a menos.

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